Cuatro requisitos que deben cumplir los edificios de las ciudades inteligentes
Los edificios inteligentes son el medio y el fin para conseguir las ciudades del futuro. Ciudades inteligentes desde un punto de vista integral y multidisciplinar que mejoren la inclusión de soluciones y sistemas tecnológicos. Para ello, la aplicación del Internet de las cosas en la vida diaria de las ciudades actuales supone un punto de partida importante para llegar a convertirlas en ciudades inteligentes. Actualmente ya se aplica en ámbitos de movilidad, para mejorar los sistemas de transporte urbanos; en eficiencia energética, reemplazando la iluminación artificial por inteligente; dando mejores servicios al ciudadano, anticipándose a sus problemas; mejorando la gestión de residuos; y en el Sector sanitario aplicándolo a la optimización de personal y la atención a pacientes en centros sanitarios.
Aprovechando el auge del IoT y la repercusión que tendrá su aplicación en las ciudades del futuro, KONE, empresa líder en la industria de ascensores, escaleras mecánicas y puertas automáticas de edificios explica cuáles son las características que deben tener los edificios de una ciudad para ser considerada inteligente.
- Conectividad. El Internet de las cosas permite conectar en valor los ascensores o los sistemas de entrada y salida de edificios a la nube. Para ello, KONE utiliza la plataforma de IoT IBM Watson que permite reportar en tiempo real toda la información necesaria para conseguir que el edificio sea lo más inteligente posible. De esta forma, el edificio “reconocerá” al usuario y guardará su movimiento habitual, de manera que le facilitará su desplazamiento diario desde que llega al edificio hasta que se sienta en su lugar de trabajo. Por ejemplo, cuando el usuario entre en el edificio, el ascensor irá bajando hasta esperarle con la puerta abierta en la planta cero y “sabrá”, sin que el usuario pulse al botón, que debe llevarle a la planta donde se encuentre su destino.
- Seguridad. Las ventajas de conectar a la nube los sistemas de acceso o transporte del edificio son muchas, pero también hay que garantizar con ello la seguridad. Teniendo en cuenta los últimos ataques cibernéticos que han puesto en jaque a la ciberseguridad mundial, los sistemas de IoT de los edificios inteligentes deben blindar su seguridad para no sufrir un caos en el tráfico diario de personas. En España se calcula que, diariamente, se producen más de 100.000 viajes en ascensor por lo que trasladado al sistema del Internet de las cosas de un edificio, es fácil imaginar el contratiempo que supondría un ataque cibernético en la seguridad de estos sistemas.
- Ecoeficiencia. El ahorro energético se ha convertido en una de las máximas preocupaciones de la sociedad actual. Construir edificios utilizando materiales y sistemas más eficaces y eficientes debe ser una de las prioridades. Instalar en las construcciones ascensores que consigan reducir el consumo energético es básico para conseguir el certificado de eficiencia energética que todo edificio inteligente debe tener.
- Accesibilidad. El futuro de la sociedad, igual que el de las ciudades, pasa por conseguir edificios más accesibles incluyendo en esto a personas con movilidad reducida. La accesibilidad en el transporte no sólo se refiere a coches o transporte público, instalar ascensores espaciosos o adaptados para personas invidentes o con movilidad reducida es una prioridad para construir las ciudades del futuro.
“Las plataformas de IoT como la IBM con la que trabajamos en KONE consiguen que un mismo “cerebro” centralice toda la información necesaria para hacer el edificio lo más inteligente posible”, afirma Giovanni Lorino, Director General de KONE Ibérica. “Actualmente hay aproximadamente un centenar de edificios considerados inteligentes en España y aunque queda mucho camino por recorrer, las previsiones son bastante optimistas”, concluye Lorino.