Emisores eficientes, clave para un buen sistema de calefacción en el hotel

Cuando se plantea la rehabilitación de un hotel, tanto las nuevas normativas como la necesidad de incorporar el ahorro energético como parte imprescindible de cualquier actuación en el establecimiento, hace obligatorio plantear los proyectos de calefacción desde un nuevo enfoque, con nuevas ideas y nuevos equipos que permitan alcanzar el máximo rendimiento de la instalación.

Los objetivos marcados por el 20/20/20 exigen que los países definan sus hojas de ruta p ara alcanzar dichos objetivos. En este sentido España lanzó la última actualización del  Reglamento de Instalaciones Térmicas de Edificios (RITE) que exige unas características concretas de los generadores de calor con el objetivo de mejorar el rendimiento general de las instalaciones en los edificios.

Una de las medidas más notorias de este RITE es la bajada de las temperaturas de trabajo, quedando limitadas a un salto térmico con el ambiente de 40°C. Esto es, que para una temperatura ambiente de 20°C, la temperatura media máxima en un emisor de calefacción será de 60°C. Un emisor tradicional de módulos de aluminio, en estas condiciones aumenta su tamaño un 33,3%.

Radiadores Jaga Estrada

Radiadores Jaga Estrada

Estas temperaturas junto con los rendimientos mínimos exigidos a los generadores de calor, marcan una tendencia clara hacia el uso de calderas de condensación como primer paso hacia sistemas más eficientes. Pero también será necesario revisar el funcionamiento de los emisores, el sistema de control y la red de distribución para poder exigirle a la instalación el máximo rendimiento.

También, el Código Técnico de la Edificación (CTE) ha provocado una mejora cualitativa en los niveles de aislamiento en la envolvente de los edificios, que reduce de las cargas térmicas de calefacción por transmisión para mantener un interior confortable.

Por todo ello, es necesario un nuevo enfoque a la hora de diseñar la instalación de calefacción en el hotel para alcanzar los niveles de confort deseados.

Una de las partes más importantes en este nuevo contexto es el emisor, que deja de ser un mero objeto que al estar a mayor temperatura que el ambiente desprende parte del calor, calefactando la estancia. La nueva reglamentación obliga a que, con temperaturas más bajas de agua, sea necesario dimensionar los emisores para que sigan cubriendo las necesidades del establecimiento.

Por tanto bajar la temperatura de impulsión del agua, como el correcto dimensionado de los emisores a baja temperatura, va a ser la base fundamental para delimitar el consumo energético de la instalación, de acuerdo con los objetivos que se quieren alcanzar en la instalación, tanto en confort para los clientes, como en ahorro energético.

Las nuevas calderas de condensación, nos permiten programar curvas de funcionamiento en base a la temperatura recogida por un sensor externo. Pero al final, es el emisor de baja temperatura y un correcto dimensionado lo que nos va a permitir alcanzar los mejores resultados en cuanto a ahorro energético. Cuando trabajamos a baja temperatura, necesitamos aumentar la superficie de intercambio de calor con el ambiente exponencialmente.

Hasta ahora, el único emisor que se venía utilizando a baja temperatura era el suelo radiante, ya que en sí, es el radiador con la mayor superficie de intercambio posible, puesto que ocupa toda la superficie de la estancia a calefactar. Pero que trabaje a baja temperatura no significa que funcione de una forma eficiente, es decir, consumiendo la menor cantidad de energía posible.

Como resumen general, vemos como la calefacción a baja temperatura hay que separarla en dos escalones, en base a lo que se baje la temperatura del agua. Una primera etapa definida por las nuevas normativas donde la temperatura de diseño del agua se basa en un salto térmico con la temperatura ambiente de 40°C, es decir, temperaturas de impulsión entre 55°C y 65°C, donde se puede dimensionar la instalación con radiadores estáticos de baja temperatura, con bajo contenido en agua y baja masa para dar una rápida respuesta para ajustarse a la demanda real instantánea de cada estancia de una instalación, y con gran flexibilidad de dimensionado para adaptar los emisores a los espacios disponibles para su instalación.

Jaga DBE

Sistema Jaga DBE para transformar emisor estático en dinámico

Y un segundo escalón, donde hay una mayor exigencia de ahorro energético, con temperaturas de impulsión de agua que pueden llegar hasta 35°C. Para estos casos las bombas de calor aire/agua y las bombas de calor geotérmicas son las que mejores rendimientos ofrecen pero se hace necesario usar sistemas dinámicos que nos mejores la emisión de las unidades terminales, y además, nos permitan la emisión en frío.

En este sentido, el Instituto Tecnológico Hotelero (ITH) está llevando a cabo un proyecto piloto en colaboración con la empresa Jaga España, para testar y demostrar que estos sistemas eficientes pueden ayudar a los hoteles a adaptarse a la normativa vigente con los mayores rendimientos posibles en materia de calefacción.

Coralía Pino López
Jefe de Proyectos, Responsable del Área de Sostenibilidad y Eficiencia Energética
Instituto Tecnológico Hotelero (ITH)

@corapino