Del “buscar en” al “pensar a través”: la disrupción digital que redefine Internet

Artículo de opinión por: Álvaro Carrillo de Albornoz, director general de ITH

Hace apenas un año compartíamos una reflexión sobre un cambio profundo, y silencioso, en los hábitos digitales de millones de personas. Cambiar un hábito digital a escala global no es sencillo. Sin embargo, la llegada de la inteligencia artificial generativa a través de aplicaciones como ChatGPT, Gemini o Perplexity está transformando, de manera progresiva pero irreversible, la forma en la que los usuarios interactúan con Internet.

Pasamos de “buscar en” Internet desde un teclado, a “conversar con” Internet desde un móvil, y cada vez más, a esperar una única respuesta relevante, no una lista de enlaces. Esta evolución no solo cambia la experiencia de usuario, sino que redefine la propia esencia de Internet: de ser una biblioteca infinita, se está convirtiendo en un asistente personal, inteligente y contextualizado, capaz de anticiparse y adaptarse a nuestras necesidades.

Una nueva capa por encima del buscador

En este nuevo escenario, la relevancia ya no se mide solo en SEO o SEM. Lo que empieza a contar es cómo aparecemos en las conversaciones con ChatGPT o Perplexity, no en los rankings de búsqueda tradicionales. Aquí es donde surge un nuevo concepto: Answer Engine Optimization (AEO). Se trata de optimizar la información para que los motores de respuesta con IA la seleccionen, interpreten y presenten como parte de sus respuestas.

Esto anticipa un cambio estructural: el nuevo “cliente” de Internet no es la persona, sino la inteligencia artificial. Las webs dejarán de brillar para el usuario final y empezarán a estar diseñadas para ser legibles, estructuradas y accionables por asistentes de IA. Nos enfrentamos a una Internet menos “humana” y más “inteligente”; menos B2C y más B2AI.

El sector hotelero y turístico no queda al margen de esta disrupción. Los viajeros ya no solo comparan precios o localizaciones en buscadores tradicionales; ahora, asistentes de inteligencia artificial son capaces de diseñar itinerarios personalizados, recomendar hoteles en función de preferencias individuales e incluso de realizar reservas directas. Para los hoteles, esto implica un cambio profundo en su relación con el cliente: el primer contacto ya no se produce en la web del establecimiento ni en una OTA, sino en la respuesta de un motor de IA. La visibilidad, la reputación digital y la capacidad de integrarse en este nuevo canal serán factores determinantes para la competitividad del sector en los próximos años.

Los asistentes se posicionan así como nuevos intermediarios entre el usuario final y el producto o servicio. ¿Acortan o alargan el canal? ¿Sustituirán a Google y Booking, o actuarán como una capa adicional? Lo cierto es que debemos empezar a definir nuevos modelos de interacción y de negocio, para mantener la sostenibilidad económica de esta nueva Internet.

Las piezas del futuro se están alineando

Los avances en inteligencia artificial no vienen solos. Sam Altman, CEO de OpenAI, declaró en noviembre de 2024 que la Inteligencia Artificial General (AGI) , una IA con capacidades cognitivas similares a las humanas, podría lograrse en 2025, y que su desarrollo es “básicamente un problema de ingeniería”. En enero de 2025, en el blog de OpenAI, reafirmó que ya saben cómo construir esa AGI “tal como la hemos entendido tradicionalmente”.

Paralelamente, Elon Musk, con su empresa Neuralink, ha dado un paso de ciencia ficción hacia la realidad. En enero de 2024, se implantó con éxito el primer chip en el cerebro de Noland Arbaugh, una persona con tetraplejia que ahora puede interactuar con un ordenador mediante el pensamiento. Estamos asistiendo a los primeros pasos hacia una interfaz humano-máquina (BCI) funcional.

De “buscar” a “pensar” a través de Internet

Todo esto nos lleva a una conclusión inevitable: Internet está dejando de ser una herramienta externa para convertirse en una extensión cognitiva del ser humano. Hasta ahora, buscábamos en Internet. Hoy, ya conversamos con ella. Y mañana, pensaremos a través de ella.

Mientras Estados Unidos lidera con músculo tecnológico (Microsoft, Google, Amazon) y China desarrolla sus propias versiones (como DeepSeek), Europa parece asumir de nuevo el papel del regulador, corriendo el riesgo de llegar tarde a una transformación donde las economías de escala y el “first mover advantage” marcarán la diferencia.

Esto suena a ciencia ficción, pero no lo es. Ya lo estamos viendo. Estamos al inicio de una revolución digital profunda, y lo más apasionante es que somos testigos directos de su nacimiento. Una transformación digital, sí, pero que debería ser, ante todo, una transformación inteligente.

 

Sobre Álvaro Carrillo de Albornoz:

Es Ingeniero Aeronáutico de formación y Executive MBA por el Instituto de Empresa. Comenzó su carrera profesional en 1997 en el mundo de la consultoría aeronáutica, y aporta una visión global hacia la innovación y la tecnología tras 8 años en ENDESA en las direcciones de I+D+i y de Estrategia corporativa.

Desde el año 2008 dirige el Instituto Tecnológico Hotelero (ITH) como referente de la mejora de la competitividad del sector Hotelero mediante la Innovación y la Tecnología. Compagina esta labor con la de director de la Plataforma Tecnológica del Turismo, ThinkTur; presidente de la asociación eAPyme (para la transformación digital de pymes y autónomos) y como profesor asociado al área de estrategia del Instituto de Empresa.